Virgo
“La madre”
Los signos de tierra nos hablan del poder de crear realidades. En Tauro surge el deseo, en Virgo este deseo es trabajado y en Capricornio expresado. Los tres forman parte de la cualidad Tierra: el poder de realizar.
A Virgo se le relaciona con la casa 6, la casa del servicio, porque trabajar para alcanzar un deseo en verdad es un servicio (una disciplina, un esfuerzo) que uno se aplica a si mismo. Esto también puede ser visto en relación a los demás, ayudar o servir a alguien es trabajar para que el deseo de este alguien se cumpla.
Por tanto en Virgo (“la virgen”) tenemos a la Madre, aquella que nutre (sirve) al Hijo para que este de mayor sea lo que su alma desea ser. “Un cachorro de león no se preocupa por ser un gran león, porque el sabe que algún día lo será”, y este surge de la crianza llevada acabo por la madre. La confianza del hijo en “el mañana” (futuro) proviene del trabajo que la madre realiza con “el hoy” (presente).
El gran complemento de Virgo es Piscis, porque en “los peces” Virgo encuentra el agua (la emoción) que hace flexible y amoroso su trabajo. Y al revés Piscis encuentra en “la madre” la inteligencia práctica que le da sentido a su excesiva y a menudo descontrolada emotividad.
*Además de este artículo realizamos una meditación en la energía de Virgo, si quieres participar visita nuestra página de meditaciones de Luna Llena.
ASTROLOGÍA ESOTÉRICA
Los Planetas Regentes
Hay dos maneras de utilizar las energías de un signo según sea el tipo de conciencia implicado:
- Una menos evolucionada que está motivada por los aspectos materiales y relacionada con la astrología exotérica o mundana.
- La segunda más evolucionada, está motivada por los aspectos espirituales y relacionada con los significados esotéricos de los signos, planetas y rayos¹.
Veamos pues cómo se manifiesta la energía de "la virgen" según sea el tipo de conciencia implicada:
Desde la perspectiva materialista o menos evolucionada la conciencia que reencarna a través de Virgo está regida por la frase:
«que reine la materia»
Aquí la conciencia es poco evolucionada, su atención está puesta en la materia y sus leyes. Sus deseos son materialistas y “la madre” ofrece al “hijo” (la conciencia) los recursos materiales para que este los lleve a cabo.
El regente mundano (o exotérico) de este nivel es el aspecto inferior de Mercurio, es decir, una mente condicionada por el deseo. Una mente centralizada únicamente en el deseo, es una mente egoísta, una mente que analiza, critica y censura todo aquello que no es conveniente para que su deseo se cumpla. En este caso la luna solo es el instinto al servicio de esta mente (Mercurio) inferior.
Ahora bien, desde la perspectiva espiritual o más evolucionada la conciencia que reencarna a través de "la madre" está regida por la frase:
“Yo soy la madre y el niño, Yo Dios, materia soy”
En esta frase se amaga el enorme misterio de Virgo; para una conciencia evolucionada la energía de este signo ofrece la oportunidad de reconocer la Voluntad de Dios (yo Dios) de manifestar a través de una forma (materia) la unión de la madre (personalidad) y el niño (alma).
La LUNA (Vulcano)
Para lograrlo el regente esotérico es la Luna que, a través de los significados superiores de este signo, amaga el poder de “forjar” del dios Vulcano. Es decir, a través de las cualidades superiores de Virgo, la triada lunar inferior (cuerpo físico, emotivo y mental) puede ser forjada por la voluntad (Vulcano) del Alma para su expresión.
Si nos fijamos en el símbolo del signo vemos como una "m", tres lineas verticales unidas con un final que mira hacia el interior. Y esto nos sugiere que es en el aspecto subjetivo de la conciencia donde está “el taller del alfarero”, donde se forja la unión del alma con la materia, siendo la voluntad la intención del artesano y la triada lunar inferior el barro.
En Virgo la Conciencia (el Alma) es consciente de que la forma lunar o materia mas básica de expresión puede ser utilizada (forjada o trabajada) para construir “un niño dios”, es decir una forma de expresión condicionada por el amor y no por el egoísmo o deseo material. En este nivel el poder del hijo condiciona a la madre y no al revés. Esto está bellamente descrito, en el pasaje evangélico donde el niño Jesus de 12 años, (12 años es el fin de un ciclo), ante el requerimiento angustiado de la madre contesta:
“¿Por qué me buscabas? ¿No sabías que es necesario que yo esté en los asuntos de mi Padre?”.
Aquí el hijo (el alma) ya no está interesada por los aspectos personales relacionados con la madre (materia-María), sino por los aspectos espirituales relacionados con el Padre.
Rayos¹ implicados a través de VIRGO
A través de Virgo nos llega la energía del 2ºR de Amor y Sabiduría y la del 6ºR de Devoción e Ideal. El amor, la comprensión, el idealismo o la devoción son cualidades muy necesarias para poder construir en la conciencia subjetiva, “la cueva en el Corazón”, la expresión del Espíritu en la Materia.
Para ello participan el 4ºR de Armonía y Belleza a través del conflicto (la Luna) y el 1ºR de Voluntad y Poder (Vulcano), ya que para que la forma/materia se identifique con conciencia espiritual es inevitable que surja el conflicto y el poder de utilizarlo para forjar a través de él la belleza y la armonía, es decir la expresión del espíritu en una forma.
¹ Los 7 Rayos son las siete energías principales que rigen al universo, penetrando en nuestro sistemas solar a través de los 12 signos y concretándose en los 7 planetas sagrados.
David C.M.