CAPRICORNIO
Capricornio como signo de tierra cardinal tanto para bien como para mal siempre marca un punto de realización, “la cabra alcanza la cima”, una realidad que es lograda gracias a la fuerza de voluntad, inteligencia, constancia y disciplina que tanto caracteriza a este signo.
En Capricornio nace el Cristo, porque este signo tiene el don de realizar lo divino en la materia, y, ¿hay algo superior que un dios hecho humano?
Es por esto que Capricornio rige la casa 10 (el numero perfecto) del horóscopo, la casa de los “reyes”, la casa con mas poder de la carta natal, el lugar donde se expresa la vocación, el multiplicado talento que hace del ser-humano un dios.
El complemento ideal de este signo es Cáncer, la cualidad que reencarnación tras reencarnación trae al mundo los cuerpos lunares con sus herencias kármicas, talentos y defectos que, a través de las virtudes de Capricornio, podrán expresar el amor incondicional que toda Alma esta destinada a manifestar.
Cáncer es el aspecto sensible, el agua que riega la semilla que se liberará en la disciplinada y conquistadora tierra de Capricornio.
*Además de este artículo realizamos una meditación en la energía de Capricornio, si quieres participar visita nuestra página de meditaciones de Luna Llena.
ASTROLOGÍA ESOTÉRICA
Los Planetas Regentes
Ahora bien, hay dos maneras de utilizar las energías de un signo según sea el tipo de conciencia implicado. Una está motivada por los aspectos materiales y relacionada con la astrología exotérica o mundana; y la segunda, lógicamente más evolucionada, está motivada por los aspectos espirituales y relacionada con los significados esotéricos de los signos, planetas y rayos¹. Veamos pues cómo se manifiesta la energía de “la cabra” según sea el tipo de conciencia implicada.
Desde la perspectiva materialista la conciencia que reencarna a través de Capricornio está regida por la frase:
«Que rija la ambición y que la puerta se mantenga abierta».
Parece claro que reencarnación tras reencarnación el don de Capricornio, el poder de realizar, es imperturbable. La ambición, la cualidad que se amaga tras cualquier logro, es su principal definición. Pero, como parece sugerir la frase, es una ambición egoísta y por tanto creadora de karma, causas y efectos que en otras vidas deberán ser sanados, de ahí que la puerta deba permanecer abierta para las futuras reencarnaciones.
El regente ortodoxo de este signo es el aspecto inferior de Saturno, la dificultad, el impedimento que impele a la conciencia egoísta a centrarse en si misma, a encerrarse en su torre, a disciplinarse con la única obligación de conseguir su ambición o deseo por encima de todo. Pero toda conciencia egoísta amaga una “trampa”, encerrada en su torre se torna inflexible, se cristaliza, repite el patrón caducado de una conducta que inevitablemente trae la destrucción.
Ahora bien, desde la perspectiva espiritual la conciencia que reencarna a través de Capricornio está regida por la frase:
«Estoy perdido en la luz suprema y a esa luz le doy la espalda».
La frase sugiere el poder de alcanzar la máxima cumbre, “ver la luz suprema”, pero parece ser una luz tan poderosa que la conciencia se pierde …, y es por esto que necesita darle la espalda y mirar otra vez a su entorno terrenal para que esta luz tenga un sentido. Dicho con otras palabras, una vez alguien ha alcanzado una visión superior esta visión necesariamente debe ser compartida, ofrecida como servicio práctico a los demás. De hecho si nos fijamos tras Capricornio viene Acuario, el gran signo del servicio.
Subir a la montaña, tomar aire puro y descender en plenitud sanadora, este es el significado simbólico de la frase.
Saturno
El regente esotérico de Capricornio también es Saturno pero entendido desde su aspecto superior, es decir, entendido a través de aquella conciencia que es capaz de comprender que las limitaciones o dificultades kármicas saturninas amagan tras de si una gran oportunidad.
Hay un momento en la conciencia de todo ser-humano que “se da cuenta de” que su problema o dificultad son la oportunidad para crear un verdadero cambio; ya no es posible seguir como hasta entonces, repitiendo caminos de lucha inútiles, enemigos auto-creados, patrones tóxicos de conducta ..., y es en ese “darse cuenta de” que la conciencia adquiere la percepción que le permite parar, observar y decidir desde el amor del alma el camino a seguir. Podríamos decir un nuevo camino, una ambición mas espiritual que requerirá de una nueva disciplina, voluntad e inteligencia, en definitiva, de una conducta y realización superior a la hasta entonces conocida.
Rayos¹ implicados a través de Capricornio
Las energías superiores implicadas a través de Capricornio son el 1ºR de Voluntad y Poder, el rojo, el 3ºR de Inteligencia Practica o Adaptabilidad, el verde, y el 7ºR de Orden, Ceremonial o Magia, el violeta.
Con estas energías superiores regentes es claro porque en Capricornio existe la posibilidad de alcanzar la cumbre. Porque, no son la voluntad, la capacidad de adaptación y una cierta organización las cualidades mas necesarias para alcanzar la cima de una montaña? …, este es el don de este poderoso signo.
Aun así podemos caer en el error de pensar que Capricornio con tanta voluntad y disciplina no manifiesta amor, pero nada mas lejos de la realidad. Hemos de recordar que nuestro Sol (nuestro Dios) está regido por el 2ºR de Amor y Sabiduría y por tanto todos los rayos, signos o planetas que trabajan bajo Su luz están bañados por el amor que El atesora. Es en este sentido que en Capricornio este amor se expresa como la voluntad inteligente y disciplinada que puede manifestar en la materia la luz suprema de este Amor Superior que a todos nos ilumina.
¹ Los 7 Rayos son las siete energías principales que rigen al universo, penetrando en nuestro sistemas solar a través de los 12 signos y concretándose en los 7 planetas sagrados.
David C.M.